El verano, esa estación que la mayoría espera con ganas, puede llegar a ser muy incómodo para aquellas personas que tienen la piel sensible. Por eso, a continuación, te damos 8 consejos para cuidar la piel sensible lo mejor posible.
- Simplifica la rutina de cuidado de la piel. Como menos productos utilices, menos probabilidades de reacción tendrá tu piel. Eso sí, los pasos imprescindibles son: limpiador, crema hidratante y protector solar.
- Evita los productos que contengan químicos agresivos. Deberías usar cosméticos sin perfumes, sin colorantes, sin conservantes y sin parabenos.
- Relacionado al consejo anterior, te recomendamos que utilices productos especialmente formulados para pieles sensibles. Intenta que sean cosméticos hipoalergénicos, es decir, que producen una reacción alérgica muy reducida o nula.
- No dejes de exfoliarte. A veces algunos exfoliantes pueden irritar la piel y, por eso, muchas personas se saltan este paso en su rutina. ¡Error! Exfoliarse es imprescindible siempre, pero con los productos específicos (como hemos comentado en el consejo anterior).
- Usar protector solar es importante y más para las pieles delicadas. El protector solar debe ser de amplio espectro y con SPF 50+. Recuerda aplicarlo cada dos horas o inmediatamente después de sudar, nadar, etc. También es importante que limites tu tiempo al sol, evitando la exposición entre las 12 y las 16 horas.
- Intenta mantener una buena hidratación bebiendo suficiente cantidad de agua, así como a través de cosméticos.
- Reduce el tiempo en la ducha. En verano tendemos a ducharnos más de una vez al día. Especialistas en dermatología recomiendan que esta sea entre cuatro y cinco minutos, ya que hacerlo en exceso o con agua demasiado caliente puede provocar que la piel se seque demasiado, lo que provoca picor, inflamación e incluso eccema.
- Utiliza ropa con tejidos naturales y transpirables, como el algodón. ¿Por qué? Porque los sintéticos causan más sudoración y pueden llegar a irritar la piel.