¿Por qué autoexplorarse?
Observarse la piel, es importante para poder diagnosticar cuanto antes, un cáncer de piel. La piel es superficial y mediante la vista podemos detectar cambios. Al autoexplorarnos vamos a conocer nuestra propia piel, y si cambia algo lo podremos percibir y consultar con el médico para proceder al diagnóstico.
Los cambios que podemos apreciar son lesiones de la piel que cambian de forma, color o tamaño o aparición de nuevas lesiones (lunar, herida, mancha…).
Hablemos del melanoma
Se trata de un cáncer de piel que surge por alteraciones en lunares que ya teníamos o que aparecen sin tener nada previo.
Para facilitar la detección del melanoma, existe la regla del A, B, C, D, E. Cada una de las letras hace referencia a una característica:
A: Asimetría
B: Bordes irregulares y con picos.
C: Color variado, no homogéneo. Por ejemplo: del marrón claro al negro (varios tonos de marrón), color grisáceo, azulados.
D: Diámetro mayor de 6 mm.
E: Evolución. Cambio de aspecto en cuanto a tamaño, color o espesor.
Si alguna lesión presenta alguna de estas características debe consultar con su dermatólogo o médico de familia para hacer una valoración. No demorarlo, especialmente, si es reciente el cambio.
En el caso, por ejemplo, de tener un número significativo de lunares es recomendable acudir al dermatólogo para valoración de forma periódica.
¿Qué me miro? ¿Cada cuánto?
Recomendamos explorar toda la piel detenidamente cada 3-4 meses. No debemos olvidar zonas como las palmas, plantas, el área genital o el cuero cabelludo.
Es mejor tener unos minutos sólo dedicados a la autoexploración, mejor delante de un espejo grande y uno pequeño adicional, con buena luz y temperatura adecuada.
- Comenzaremos con la cara y cuello: la piel de la nariz, mejillas frente, labios, orejas (y la parte de atrás de las orejas).
- Delante del espejo observaremos el pecho, el abdomen, el área pélvica, los brazos completos y las manos (no olvidar los espacios entre los dedos y uñas). Además, veremos la parte de atrás de los brazos incluyendo codos y antebrazos y axilas. No olvidar la parte inferior a las mamas.
- De espaldas al espejo de cuerpo entero y con la ayuda del espejo de mano, podremos ver la parte posterior de nuestro cuerpo: cuello y orejas, hombros, espalda completa, glúteos y piernas completas. Si para nosotros es difícil, a parte de nuestra propia observación alguien puede ayudarnos, preferentemente siempre la misma persona.
- Para ver la parte interior de piernas hasta tobillos y área genital puedes sentarte con las piernas abiertas.
- Dedica también unos minutos a los pies para ver las plantas, dorso, cara lateral de los pies, así como explorar detenidamente entre los dedos de los pies y las uñas.
- Por último, el cuero cabelludo. Es mejor que alguien nos ayude, hay que ir separando los mechones puede ser de ayuda un peine y un secador de pelo.
- ¡Recuerda! No olvides inspeccionar las manos y pies, las palmas, las plantas y dorsos, así como entre los dedos.
“La piel tiene memoria”
Cuando usamos está expresión nos referimos a que la piel va sufriendo cambios (daños en ADN) por la exposición solar que recibe cada día (aunque no haya quemaduras), y también, por las quemaduras solares que recibe en la vida. No es necesario estar tumbado al sol para acumular daño solar, un simple paseo sin protección solar hace que vayamos acumulando radiación solar que la piel almacena. A largo plazo (al menos 20 años) es cuando se van a ver sus efectos: manchas y posible cáncer de piel.
Precaución con el sol
Desde la infancia, debemos cuidar y educar:
- No exponerse al sol innecesariamente.Intentar estar a la sombra, evitar la exposición solar entre las 12 y las 16 horas.
- Protegernos con ropa y complementos: colores oscuros, manga larga, sombreros o gorras. Gafas de sol con clasificación UV. Actualmente se puede comprar ropa con fotoprotección.
- Aplica protección solar cada día. No solo en la playa o la piscina. Es mejor un factor elevado, FPS 50+, los filtros duran unas 2 horas, por lo que si es preciso hay que repetirlo. Elige una textura adecuada tu gusto y a las necesidades de tu piel. Ladival cuenta con una amplia gama de protectores solares que van mas allá de la protección solar, aportando beneficios o cuidando tu piel de forma específica.
